Estados Unidos empezó este lunes 21 de diciembre a administrar la vacuna de la farmacéutica Moderna, que se suma a la de Pfizer en el país, dentro de la “ofensiva” del Gobierno contra la covid-19.

“Gracias a la Operación Warp Speed (la operación lanzada por las autoridades de EE.UU. para facilitar y acelerar el desarrollo, la fabricación y la distribución de vacunas) estamos ahora a la ofensiva contra el virus”, dijo el secretario estadounidense de Salud y Servicios Humanos (HHS, en inglés), Alex Azar, en una rueda de prensa telefónica.

De acuerdo a Azar, unos tres mil 700 centros de salud recibirán entre este lunes y el martes cerca de 3,5 millones de dosis la vacuna de Moderna, que tiene un 94 % de efectividad, según datos oficiales.

Para probar que confía en el suero de Moderna, que tiene sede en el estado de Massachussets (EE.UU.), Azar anunció que será vacunado con esa solución “próximamente”.

Por otro lado, el jefe de la Operación Warp Speed (Máxima velocidad), Moncef Slaoui, explicó que durante las fiestas navideñas es “especialmente importante” mantener las medidas de seguridad, como el uso de mascarillas, porque la gran mayoría de la población es todavía “vulnerable” al virus.

Esa operación para transportar la vacuna a más de tres mil 700 puntos de Estados Unidos es mucho mayor que la que se organizó para repartir en 636 localizaciones el suero de la farmacéutica Pfizer, el primero aprobado por las autoridades de EE.UU. y que 2,9 millones de estadounidenses recibieron la semana pasada.

Pfizer

El gigante Pfizer, conocido por fabricar Viagra, organizó su propio sistema para distribuir la vacuna en los hospitales; pero, Moderna, hasta hace poco una pequeña empresa emergente, ha contado con la ayuda del Gobierno de EE.UU. en el marco de la Operación Warp Speed.

La enorme diferencia en el número de puntos de distribución (de 636 a 3.700) se debe a los requisitos de conservación para cada vacuna.

El suero de Moderna es transportado en unas pequeñas cajas refrigeradas que deben mantener una temperatura de -20 grados centígrados; mientras que la vacuna de Pfizer necesita unos arcones de mayor tamaño, ya que debe ir rodeada de hielo seco para mantenerse en el rango de entre -60 y -80 grados.

Todas las dosis, ya sean de Moderna o Pfizer, viajan acompañadas de un fuerte dispositivo de seguridad, integrado entre otros por el Cuerpo de Alguaciles de EE.UU., y deben ser almacenadas en refrigeradores cerrados con llave.

Estados Unidos registra 17.862.876 casos confirmados y 317.749 fallecidos, de acuerdo con el recuento independiente de la Universidad Johns Hopkins.