El presidente Joe Biden anunció el domingo por la noche que firmó un indulto «completo» para su hijo Hunter Biden, quien este año se declaró culpable de nueve cargos por evasión fiscal y fue hallado culpable de cargos por posesión ilegal de un arma de fuego.

«Desde el día que tomé la Presidencia dije que no interferiría con la decisión del Departamento de Justicia y mantengo mi palabra a pesar de que he visto a mi hijo acusado selectiva e injustamente», se lee en el comunicado enviado por la Casa Blanca a semanas del fin de su mandato.

Al asumir la Presidencia en enero de 2025, Donald Trump no podrá rescindir esta clemencia que Biden le ha otorgado a su hijo. Implica que Hunter Biden no será sentenciado por los cargos que se le imputan —ambas sentencias se iban a conocer en diciembre de 2024— y deja sin efecto cualquier posibilidad de que cumpla una condena de prisión, algo que era una posibilidad real.

El mandatario aseguró que aunque cree en el sistema de justicia, «también creo que la política infectó este proceso e indujo a un error judicial».

Los casos legales contra Hunter Biden

En junio de 2024, un jurado declaró a Hunter Biden culpable por delitos de posesión ilegal de armas: mentir a un vendedor con licencia federal, hacer una declaración falsa en su solicitud al decir que no consumía drogas y posesión ilegal de un arma de fuego en octubre de 2018. Días después, sus abogados comenzaron una batalla legal pidiendo la anulación de su condena al alegar que hubo errores técnicos en el proceso. Entre esos errores, mencionaron que uno de los tribunales no tenía jurisdicción para proceder en el juicio. La audiencia de sentencia por este caso estaba planteada para el 12 de diciembre.

Biden dijo en su comunicado que en este caso no hubo factores agravantes, como que su hijo hubiera usado el arma en un crimen, que hubiera realizado compras múltiples o que la hubiera adquirido como testaferro: «Las personas casi nunca son llevadas a juicio por delitos graves únicamente por cómo completaron un formulario de armas», dice el mandatario.

Para el caso fiscal, la fecha de la audiencia de sentencia estaba fijada para el 16 de diciembre. En este, Hunter Biden se declaró culpable de nueve cargos que incluyen evasión, haber reportado declaraciones fiscales fraudulentas, haber omitido declaraciones fiscales y el pago de impuestos. Por los nueve cargos que enfrentaba, estaba sujeto a una posible sentencia de hasta 17 años de prisión o multa de hasta 1.3 millones de dólares. El perdón lo libra de estas sentencias.

De acuerdo con las acusaciones presentadas por fiscales, Hunter Biden omitió el pago de impuestos por al menos 1.4 millones de dólares en un periodo de cuatro años, entre el 2016 y 2019. El periodo en el que habría omitido estos pagos coincide con un periodo en el que él dijo que enfrentaba una lucha contra la adicción a las drogas. Durante ese tiempo él habría tenido ganancias millonarias a raíz de sus negocios con empresas extranjeras, de acuerdo con los fiscales. La acusación formal alegaba que Hunter Biden vivía con lujos mientras incumplía la ley tributaria, gastando su dinero en cosas como strippers y hoteles de lujo.

El presidente dijo que en este caso judicial, aquellos que han pagado sus impuestos de forma tardía por adicciones serias, pero que los pagaron con intereses y penalidades, «por lo general reciben resoluciones no penales. Es claro que Hunter fue tratado de forma diferente».

Las razones que da el presidente Biden para perdonar a su hijo, a pesar de haber dicho que no lo haría

Según Joe Biden, los cargos en los casos de su hijo solo se presentaron alentados por sus opositores políticos en el Congreso: «Ninguna persona sensata que analice los hechos en los casos contra Hunter puede llegar a una conclusión diferente a que Hunter fue señalado solo porque es mi hijo y eso está mal».

Para el presidente, los casos en contra de su hijo fueron «un esfuerzo por quebrar a Hunter, que lleva cinco años y medio sobrio, incluso frente a ataques implacables y un procesamiento selectivo». Biden asegura que al intentar quebrar a su hijo, quisieron doblegarlo a él.

Cerró el comunicado asegurando que durante toda su carrera ha seguido un principio: «Decirle a los estadounidenses la verdad (…) Espero que puedan entender por qué un padre y un Presidente llegaron a esta decisión».

El insólito perdón al hijo del presidente Biden

En el comunicado emitido por la Casa Blanca, Biden dice que la clemencia exime a su hijo «de aquellas ofensas contra Estados Unidos que ha cometido o pudo haber cometido o en las que pudo haber participado en el periodo que va desde el 1 de enero de 2014 al 1 de diciembre de 2024».

Según el diario The New York Times, Hunter Biden no calificaría para una recomendación de clemencia bajo el criterio usado por la Oficina del Abogado de Clemencia del Departamento de Justicia, quien es la encargada de identificar y decidir estos casos. El diario explica que esta oficina recomienda perdones completos, como el otorgado por Biden a su hijo, para personas que ya han cumplido sus sentencias. En el caso de Hunter Biden, explican, ni siquiera ha sido sentenciado.

Sin embargo, explica el Times, los presidentes tienen autoridad ilimitada para indultar a quien quieran, independientemente de las recomendaciones hechas por esta oficina.

El presidente ha sido presionado por distintas organizaciones que apoyan los derechos de personas encarceladas, como FWD.us. Su directora ejecutiva, Zoë Towns, dijo al diario tras el anuncio de Biden que el presidente debe poner su atención en dar clemencia a todas esas personas cumpliendo «largas sentencias desproporcionadamente en prisiones federales. Nuestra atención debe estar allí».

La Oficina del Abogado de Clemencia del Departamento de Justicia ha recibido cerca de 12,000 peticiones de clemencia durante la presidencia de Biden. El Times reporta que ha otorgado 157 peticiones de clemencia. Según el diario, ese número lo pone por debajo del primer gobierno de Donald Trump, quien concedió 238.

El texto íntegro del comunicado de Biden sobre el indulto a su hijo

Hoy firmé un indulto para mi hijo Hunter. Desde el día en que asumí el cargo, dije que no interferiría en las decisiones del Departamento de Justicia, y he cumplido con mi palabra, incluso mientras observaba cómo mi hijo era procesado de manera selectiva e injusta.

Sin factores agravantes, como el uso en un delito, múltiples compras o la adquisición de un arma como comprador intermediario, casi nunca se lleva a juicio a las personas por cargos graves relacionados únicamente con el llenado de un formulario de armas. Aquellos que han pagado sus impuestos tarde debido a adicciones graves, pero los han saldado posteriormente con intereses y multas, suelen recibir resoluciones no penales. Es evidente que Hunter fue tratado de manera diferente.

Los cargos en sus casos surgieron únicamente después de que varios de mis oponentes políticos en el Congreso los instigaran para atacarme y oponerse a mi elección. Luego, un acuerdo de culpabilidad cuidadosamente negociado, aprobado por el Departamento de Justicia, se desmoronó en la sala del tribunal, con varios de mis oponentes políticos en el Congreso atribuyéndose el mérito de haber ejercido presión política sobre el proceso. Si el acuerdo de culpabilidad hubiera seguido en pie, habría sido una resolución justa y razonable para los casos de Hunter.

Ninguna persona razonable que examine los hechos de los casos de Hunter puede llegar a otra conclusión que no sea que Hunter fue señalado únicamente porque es mi hijo, y eso está mal. Ha habido un esfuerzo por quebrar a Hunter, quien lleva cinco años y medio sobrio, incluso frente a ataques implacables y un enjuiciamiento selectivo. En el intento de quebrarlo a él, han intentado quebrarme a mí, y no hay razón para creer que esto terminará aquí. Basta ya.

Durante toda mi carrera he seguido un principio simple: simplemente decir la verdad al pueblo estadounidense. Ellos serán justos. Aquí está la verdad: creo en el sistema de justicia, pero mientras reflexionaba sobre esto, también creo que la guerra política ha infectado este proceso y ha llevado a una injusticia. Una vez que tomé esta decisión este fin de semana, no tenía sentido retrasarla más. Espero que los estadounidenses comprendan por qué un padre y un presidente llegarían a esta decisión.