El temor a una invasión rusa de Ucrania está haciendo que los precios del petróleo se acerquen a los 100 dólares por barril, una tendencia que perjudicará a las personas con bajos ingresos que tienen menos capacidad para amortiguar el impacto en los gastos diarios de sus hogares.

La posible invasión está ejerciendo una presión adicional al alza sobre unos precios ya elevados, en medio de la recuperación de la demanda tras el covid-19 y la escasa oferta, lo que supone un dolor de cabeza adicional para la Casa Blanca, que ya está luchando contra los problemas de la inflación anual más alta de los últimos 42 años.

Rusia es la mayor fuente de gas natural de Europa y el tercer productor mundial de petróleo.

Si los precios del petróleo suben aún más, tendrán efectos en los precios de la gasolina en Estados Unidos, dicen los expertos. El encarecimiento del petróleo tiende a perjudicar una amplia gama de precios al consumidor debido al aumento del coste del combustible para transportar mercancías.

El crudo Brent, de referencia mundial, cotiza a 95 dólares por barril el lunes al mediodía, después de haber superado los 96 dólares al principio de la sesión del lunes.

Los precios, que ahora están cerca de su nivel más alto desde 2014, podrían dispararse hasta los 120 dólares por barril si las exportaciones de crudo de Rusia se ven afectadas por las tensiones con Ucrania, dicen algunos expertos.