Los estrenos de Navidad y Año Nuevo nunca estuvieron tan “en veremos”, pues los precios de la ropa y los juguetes no escapan a la hiperinflación y los costos dolarizados. 

Con los precios calculados en divisas se ve “muy lejos” la intención de comprar regalos, ropa y juguetes del Niño Jesús en Navidad, así como con los estrenos “del 31”.

Con la crisis económica y el alto costo de alimentos comprar ropa o juguetes no está dentro de las prioridades de muchos marabinos.

Nelly Osorio, quien reside en el sector Los Haticos, sostiene que esta Navidad sus hijos no podrán recibir regalos pues el juguete más barato supera los cinco millones de bolívares.

“Este año creo que no habrá niño Jesús, mis ingresos no alcanzan para tantas cosas. Entre juguetes y comida pues primero está la comida”, confiesa.

En la calle se observan caras de preocupación y muchos manifiestan que casi todo lo que ganan “se va comprando comida”.

La tradición de estrenar ropa, comprar el regalo de Navidad y Año Nuevo, intercambios y “Amigo Secreto” perdieron relevancia desde hace varios años, debido a la crisis económica del país.

Pensar en “los estrenos” es más complicado ahora que el dólar no oficial superó la barrera del millón de bolívares. “Comprar un pantalón, una camisa o un vestido está más difícil”, son los comentarios que se escuchan.

Ni hablar del calzado. Unos zapatos “chimbitos” de goma para dama rondan entre los 10 y 15 dólares. Los de caballero superan los 20 dólares. Para niños se consiguen “ofertas” de cinco dólares para arriba.

Los juguetes no se quedan atrás y aunque se pueden encontrar precios accesibles no todos pueden costear su compra.

En las redes sociales se ofrecen una gran variedad de juguetes y accesorios para niños pero los más económicos se consiguen a partir de 10 dólares.

“Este año solo compraré juguetes a mi hijo más pequeño. Ya los grandes disfrutaron y para ellos habrá algún detalle para no dejarlos por fuera”, opinan algunos padres encuestados.

“Es muy difícil no poder comprar lo que los niños piden, con esta situación es muy triste no poder complacerlos”.

Otros aprovecharon ofertas y descuentos y compraron desde hace meses los obsequios. “Hace tres meses logré comprar por una página web algunas cosas y me ahorré un dinero”, comentan. 

Sin embargo las ganas de alegrar las navidades a familiares y amigos sigue intacta y para muchos vale la pena hacer el sacrifico de comprar algún detalle.

A pesar de las dificultades y la pandemia los marabinos esperan recibir la Navidad y Año Nuevo en paz con salud y en familia.