En otro episodio de caos en la Copa América, la selección de Chile tuvo que salir un parche en el uniforme tras un conflicto con la empresa Nike. La Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP) de Chile recibió hace unos días una carta en la que la firma estadounidense terminó el contrato de manera unilateral y desde los despachos chilenos se negaron a mostrar el logotipo, así que pusieron un parche con la bandera chilena en la camiseta y en los pantalones cortos.

El contrato había sido firmado en 2015, bajo la gestión del entonces presidente Sergio Jadue, y tenía una vigencia hasta el Mundial de Qatar 2022. Si la selección chilena se clasificaba a la Copa del Mundo se podía extender el contrato.

Nike reclama que la Roja incumplió una cantidad de partidos disputados por temporada, según informa La Tercera. Esos partidos que no disputó el combinado nacional fueron a consecuencia del parón por la pandemia de la covid-19 que aplazó las eliminatorias mundialistas y canceló partidos amistosos.

Desde la ANFP han entablado ya una demanda por 4.200 millones de dólares porque, según las autoridades chilenas, la compañía no entregó el dinero comprometido entre 2019 y 2020. 

Nike no ha hecho ningún pago desde la demanda. La empresa con sede en Beaverton (Oregón) pagaba cerca de siete millones de dólares anuales al organismo chileno. 

La guerra entre Chile y la firma se decidirá en el Tribunal de la Cámara de Comercio Internacional en Nueva York. Sergio Jadue, quien firmó el contrato, estuvo involucrado en una red de sobornos en la Confederación Sudamericana de Fútbol y pieza clave del FIFA Gate.

Durante el partido entre Chile y Bolivia todos los uniformes de los futbolistas fueron intervenidos. También los del cuerpo técnico. Los futbolistas con contrato con la firma de Oregón salieron al campo con los botines de Nike. Las autoridades del fútbol chileno ya han buscado un nuevo patrocinador en tiempo récord que pueda salvarles.

La CONMEBOL castiga a Marcelo Martins por criticar la Copa América

La CONMEBOL ha sancionado al capitán de Bolivia, Marcelo Martins, con un partido de suspensión y 20.000 dólares por criticar a la organización de la Copa América. Martins, quien dio positivo a la covid-19, señaló que el organismo sudamericano no pensaba en la salud de los futbolistas ni del staff. “Lo único que les importa es el dinero. ¿La vida del jugador no vale nada?”, escribió en Instagram. 

Horas después borró el mensaje y la CONMEBOL inició un expediente en su contra. Martins, finalmente, pidió disculpas al asegurar que todo fue un problema de comunicación. 

A raíz del caso Martins, ningún futbolista ni entrenador ha dado su postura pública. Hasta el momento, se registran 66 casos de coronavirus entre jugadores y personal.