Un estudio del árbol genealógico de Leonardo da Vinci revela que hoy hay 14 personas vivas en Italia que descienden del genio del Renacimiento. Alessandro Vezzosi, historiador del Museo Ideale Leonardo da Vinci de Italia, y Agnese Sabato, presidenta de la Asociación del Patrimonio de Leonardo da Vinci, encabezan una investigación para la que han rastreado la genealogía de da Vinci a lo largo de casi 700 años y 21 generaciones.

Los han analizado desde 1331 hasta la actualidad, utilizando como punto de partida al tatarabuelo de da Vinci, Michele. Estos hallazgos posibilitan a los historiadores trazar el genoma de da Vinci, con lo que pueden «explorar científicamente las raíces de su genio» y otra serie de variables, como que era zurdo y gozaba de percepciones sensoriales únicas, tal y como han escrito los investigadores en su estudio, referido a su vez por NBC.

El artista, un visionario de la ciencia que, además, pintó ‘La última cena’ y ‘La Gioconda’, entre muchas otras obras, no tuvo hijos, pero sí 22 medio hermanos. Por otro lado, cabe destacar que el genio del Renacimiento nació fuera del matrimonio el 15 de abril de 1452. Vezzosi y Sabato se han servido de documentos históricos para localizar a los parientes vivos mediante una línea masculina ininterrumpida desde el padre de da Vinci, Ser Piero, y su medio hermano Domenico. Los investigadores señalan que los descendientes vivos tienen una edad comprendida entre el año y los 85 años.

Verificación de sus restos

Ahora, la dupla desea realizar análisis genéticos de los descendientes vivos para estudiar el cromosoma Y, que se transmite a los parientes masculinos, y «en el que se imprime el perfil indeleble de la identidad personal y familiar de Leonardo», señalan los investigadores. Estiman que, al ser una línea masculina ininterrumpida, el cromosoma Y no está alterado.

Estos hallazgos contribuirían además a la verificación de los restos de Da Vinci. Fallecido en 1519, se cree que está enterrado en Amboise (Francia). Sin embargo, la ubicación de los restos es desconocida. La información que arroja la investigación de Vezzosi y Sabato permitiría encontrar y secuenciar el ADN del artista renacentista.