El tenista español defiende que el serbio, que ha pedido una exención para poder disputar el Open de Australia pese a no estar vacunado, “sabía las condiciones desde hace muchos meses”.

Rafa Nadal y Novak Djokovic son tan diferentes en su juego como en su día a día. Y en los últimos meses, su posición respecto a las políticas de prevención y lucha contra la pandemia del coronavirus los han distanciado todavía un poco más en sus posiciones. La imagen del tenista español, con mascarilla, y pidiendo respetuosamente perdón a los aficionados que le pedían algo más que un simple saludo desde la distancia –“Lo siento, no puedo firmar, lo siento, por la covid”, decía con las manos plegadas– dio la vuelta al mundo al tiempo que se conocía la noticia de que al serbio le querían conceder una exención médica para poder entrar a Australia, donde se celebra en poco más de una semana el Open de tenis, a pesar de no estar vacunado.

Mientras Djokovic sigue retenido en un hotel de Melbourne a la espera de que se resuelva su situación –sus abogados han conseguido frenar su deportación hasta una audiencia que se celebrará el próximo lunes día 10 en los juzgados–, Nadal opina que a su rival no le ha podido pillar por sorpresa la negativa de las autoridades australianas. Sabía a lo que se acogía cuando decidió declararse en guerra contra las vacunas. “No me gusta lo que está pasando, por supuesto. En cierta manera, me da pena, por él. Pero al mismo tiempo, él sabía perfectamente las condiciones desde hace muchos meses. Él fue el que tomó su propia decisión”, declaró el mallorquín a los reporteros después de ganar su partido en el torneo de Melbourne Summer Set.

Nadal, de 35 años, uno más que Djokovic, se contagió de covid el pasado mes después de jugar un partido de exhibición en Abu Dabi. Pasó, dijo, unos días “realmente duros” a pesar de haber recibido la doble pauta de vacunación. “Si haces eso, si te vacunas, puedes estar aquí. Puedes jugar el Open de Australia y en donde sea. El mundo ya ha sufrido lo suficiente como para no seguir las normas”. Por eso y porque siempre se mostró especialmente sensible con la situación – “Yo creo en lo que dice la gente que sabe de medicina y si ellos dicen que nos tenemos que vacunar, pues nos tenemos que vacunar”, declara–, el deportista español asume que la situación es realmente compleja: “Todos hemos pasado por momentos realmente duros; muchas familias han sufrido muchísimo en los últimos dos años de pandemia. Es normal que la gente aquí en Australia acabe muy frustrada con este caso, porque se han enfrentado a unos cuantos y muy duros aislamientos y ha habido muchísima gente que no ha podido volver a casa durante mucho tiempo”.

También se pronunció al respecto Daniil Medvedev, número dos del mundo: “Es difícil pronunciarme. Si tiene la exención sí debería estar aquí. De lo contrario, no. Parece fácil, pero no lo es y no sé los entresijos de la historia. Si hay algo mal con sus papeles y no le dejan entrar, es algo que podía pasar”, afirmaba el tenista.

Djokovic ha ganado nueve Open de Australia, los últimos tres de forma consecutiva. Suma, al igual que Nadal, 20 torneos de Grand Slam en su palmarés.