Las separaciones familiares que han propiciado las autoridades migratorias en el suroeste de México mantienen a migrantes varados en Tapachula, Chiapas.

Esta situación mantiene en la incertidumbre a migrantes que buscan seguir su paso rumbo al norte del país, donde su esperanza es cruzar hacia los Estados Unidos en busca del “sueño americano”.

Erikson Jairo Vargas es uno de los cientos de migrantes provenientes de Ecuador y pide la liberación de su hijo de 20 años, quien fue detenido por autoridades de migración en el punto de control de Viva México.

De acuerdo con Vargas, su hijo ha cumplido más de 10 días asegurado en la estación migratoria Siglo XXI, lugar que tiene capacidad para unas 900 personas.

Jairo Vargas narró que ha podido ver a su hijo un lapso de 15 minutos en dicha instancia migratoria, mientras que han pasado más de 72 horas de que las autoridades le han comentado que va salir.

Incluso contó que acudió con un abogado para interponer un amparo para que lo dejen salir.

Vargas es un migrante ecuatoriano, que se dedica al comercio, es perseguido político y contó que viene huyendo desde Guayaquilcon tres menores y su hijo detenido de 20 años.

Jorge Martínez es otro migrante de Venezuela, que salió de su país, a pesar de trabajar en el Gobierno, en busca de mejores oportunidades.