Cinco niños menores de cinco años fallecieron en Venezuela por covid-19 en lo que va de 2021. El reporte oficial del gobierno nacional da cuenta de que algo está pasando en el país, o los niños están más expuestos o más susceptibles.

En 2020, durante los nueve meses de cuarentena, solo se confirmó el deceso de una niña de cuatro años en abril y de un niño de tres años en junio. De resto, las muertes de niños pequeños no entraron en los registros diarios.

Pero en 2021, ya se cuentan cinco niños fallecidos por el coronavirus: 

  • El 8 de enero un bebé de 22 meses de Yaracuy.
  • El 18 de enero una niña de 4 meses de Yaracuy.
  • El 20 un niño de 6 meses de Bolívar
  • El 28 de enero un niño de 2 años de Lara.
  • El 2 de febrero una niña de 7 meses de Yaracuy.

Los niños si se contagian

En Zulia, específicamente en Maracaibo, se ha podido evidenciar que el uso del cubreboca en los niños es casi nulo, ya que los padres tienen la falsa creencia de que los menores no se contagian.

Al respecto Freddy Pachano, cirujano pediatra y jefe del postgrado de Medicina de La Universidad del Zulia (LUZ) aseguró que no ponerle mascarilla a los niños es “un error muy grave, los niños son transmisores de la enfermedad a los adultos, esta es una de las razones para no reiniciar clases”.

También explicó que “si a eso le sumas que la cepa británica se demostró es más contagiosa (no más mortal) en niños, la cosa es peor. Nosotros no tenemos en Venezuela como saber si ya tenemos casos de la cepa británica pero sería evidente que va a llegar o ya llegó”.

Según Pachano, la presencia de esta cepa británica podría explicar el repentino aumento en los contagios y fallecimientos de niños por la Covid-19, que no fueron tan evidentes el año pasado.

Como pediatra, Pachano le recomienda a los padre y representantes en Maracaibo “que sigan las recomendaciones que ha dado la Sociedad Venezolana de Infectología y Pediatría. Que no se reinicien clases presenciales aún y que se promueva el uso de cubrebocas en los niños”.

Recordó el galeno que, más allá de la repentina susceptibilidad de los menores ante el virus, “siempre la principal fuente de contagio por descuido es en el hogar con otros infectados”.