Fundaredes denunció este miércoles que su director, Javier Tarazona, y sus otros dos activistas, Rafael Tarazona y Omar García, permanecen incomunicados desde su detención el pasado 2 de julio.

«20 días en los que se desconoce de su integridad física y donde no han tenido comunicación con sus familiares y abogados», acusó la ONG de Derechos Humanos en su cuenta en Twitter.

Señaló la organización que este 21 de julio el director de Fundaredes cumple 39 años de edad “y pasa esta fecha tras las rejas, incomunicado, sin saber de su familia”.

Enfatizó, además, que Javier Tarazona es “víctima de una detención arbitraria, acusado de unos delitos que no cometió y sin derecho a tener un abogado de su confianza”, al tiempo que exige su liberación.

Resaltó en otros tuits aspectos positivos de su trayectoria, como que en 2002 “junto a un grupo de jóvenes soñadores decidió fundar la organización que luego de varias transformaciones y compromisos se conoce como FundaRedes”.

Y que el profesor es “conocido por su condición humanista y al servicio de los demás, desde sus estudios de liceo, donde ya se incorporaba en la dirigencia estudiantil y paralelamente se formaba en la Iglesia Católica”.

En ese sentido, recalcó que «se dedicó a denunciar la violencia en la frontera, comenzó a evidenciar la actuación de grupos armados irregulares en escuelas y desde allí avanzó en la documentación de las víctimas de estos hechos».

«Está injustamente detenido por alzar la voz, por ser un pregonero de la libertad, por atreverse a tocar temas sensibles que causan temor, por documentar y acompañar a las víctimas, por denunciar las graves violaciones de derechos», publicó también.

“Primer cumpleaños detenido”

Por su parte, Provea publicó también en la referida red social que el director de Fundaredes “está cumpliendo años, el primer cumpleaños que pasa detenido” y exigió también su liberación.

“Los activistas de Fundaredes son víctimas de una detención arbitraria y siguen sin poder comunicarse con familiares y abogados”, denunció la ONG dedicada también a los Derechos Humanos.

El sábado 3 de julio, los miembros de Fundaredes fueron imputados por los delitos de traición a la patria, terrorismo e incitación al odio.

Habían denunciado la supuesta relación del Estado venezolano con la guerrilla colombiana del ELN y disidencias de las FARC, así como la existencia de pistas clandestinas y laboratorios para el procesamiento de droga.