El presidente de Argentina Alberto Fernández, ha mantenido este sábado una reunión en formato virtual con los gobernadores de las 24 jurisdicciones nacionales, con quienes acordó iniciar el próximo martes la campaña de vacunación contra el coronavirus en todo el país.

Fernández informó a los mandatarios regionales que las 300.000 dosis de la vacuna rusa Sputnik V, que llegaron al país hace dos días, se distribuirán el próximo lunes por todas las provincias. 

El fármaco, que requiere mantenerse a una temperatura de 18 grados bajo cero, será transportado en camiones refrigerados, excepto en el caso de las provincias de Santa Cruz y Tierra del Fuego, a donde llegará por vía aérea.

Buenos Aires inicia la próxima semana la primera etapa de la campaña de vacunación

Según explicó Fernández, que se unió a la videoconferencia desde la Quinta presidencial de Olivos, en Buenos Aires, el objetivo del plan de vacunación es tener inmunizada «cuando llegue el otoño» a la mayor cantidad de personas de riesgo.

«Mientras tanto, cuidarnos y que nuestros compatriotas entiendan que el riesgo está latente y que hay que evitar las aglomeraciones como las de los últimos días», dijo el mandatario argentino.

Además del Jefe de Estado y de los gobernadores provinciales, en el encuentro también participaron los ministros de Interior y de Salud, Eduardo de Pedro y Ginés González García, respectivamente; la secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti; el secretario General de la Presidencia, Julio Vitobello y el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta.

Argentina recibe la vacuna

Este jueves aterrizó en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza, en Buenos Aires, el histórico vuelo AR1060 de Aerolíneas Argentinas que trajo a la nación sudamericana nueve toneladas de dosis de la vacuna rusa Sputnik V contra el coronavirus. Este embarque, que permitirá inmunizar a 150.000 argentinos, constituye el primer paso de la Casa Rosada hacia su objetivo de vacunar a 10 millones de ciudadanos para febrero.

«Nuestra sincera gratitud con @sputnikvaccine y con el presidente [de Rusia], Vladímir Putin, por el compromiso que han demostrado con nuestro país. Se abre un camino de esperanza, pero la pandemia aun no ha terminado», expresó Alberto Fernández en su cuenta de Twitter tras el aterrizaje del avión con las dosis.

Durante el vuelo de Moscú a Buenos Aires, la vacuna se mantuvo en contenedores térmicos que, gracias a un gel refrigerante especial, garantizaron la temperatura necesaria para la conservación de las dosis.

De estas primeras 300.000 dosis, 123.000 unidades se destinarán a la provincia de Buenos Aires. Según reveló en una entrevista con una emisora local el viceministro bonaerense de Salud, Nicolás Kreplak, el Gobierno argentino ya tiene acordadas con Moscú otras dos entregas de 15 millones cada una para enero y febrero.

Los primeros en recibir la vacuna serán los trabajadores del sistema sanitario, tanto público como privado. Otros grupos prioritarios son las personas de entre 18 y 59 años con enfermedades preexistentes, los mayores de 60 años, así como el personal policial, docente y auxiliar.

Rusia aprueba la vacuna para mayores de 60 años

Poco después de las declaraciones del viceministro Kreplak, el Ministerio de Salud de Rusia dio su aprobación al suministro de la vacuna Sputnik V a personas mayores de 60 años. En particular, el ministro ruso de Salud, Mijaíl Murashko, aseguró que se ha comprobado la seguridad y la eficacia de la vacuna rusa contra el covid-19 en este grupo de edad.

La vacuna Sputnik V será más barata que los fármacos extranjeros y costará menos de 10 dólares la dosis

Los desarrolladores de Sputnik V, del centro científico Gamaleya de Moscú, aseguran que el antídoto ha demostrado una eficacia más del 90 % entre personas mayores de 60 años , proporcionando «una protección completa contra los casos graves de la enfermedad para este y otros grupos de edad».

Características de Sputnik V

Sputnik V utiliza una tecnología de adenovirus humano de dos vectores diferentes, Ad26 y Ad5, que se aplican en dos inyecciones. Esta solución no contiene adenovirus humanos vivos, sino vectores adenovirales, que no multiplican y resultan completamente seguros para la salud. De hecho, el fármaco se basa en una plataforma de dos vectores ya existente con la que ya se crearon otras vacunas.

Al mismo tiempo, el precio de una dosis de la vacuna en los mercados extranjeros no superará los 10 dólares, mientras que la disponibilidad de una forma liofilizada (seca) del fármaco facilitará significativamente la logística de su distribución en los mercados internacionales, ya que se puede almacenar a una temperatura más alta (de dos a ocho grados) que la versión líquida.

A estas alturas de la investigación, la duración de la protección del organismo sigue siendo una gran incógnita, ya que no ha pasado tiempo suficiente como para poder sacar conclusiones. No obstante, el director del centro Gamaleya, Alexánder Guíntsburg, aseguró que «la inmunidad de una vacuna similar contra el ébola basada en vectores adenovirales heterólogos duró dos años«, que fue lo que duró el tiempo de observación en África.

Si bien el experto no descarta la posibilidad de que una persona se infecte con covid-19 tras ser vacunado con Sputnik V, subrayó que en ese caso se trataría de un transcurso asintomático de la enfermedad o con síntomas leves que no requerirán hospitalización.