Proxima Centauri, a cuatro años luz de nosotros, es la estrella más cercana a la Tierra después del Sol. Cualquier descubrimiento astronómico relacionado con ella por lo tanto puede ser de enorme interés por las puertas que pueda abrir. Es el caso de la nueva señal de radio detectada por un radiotelescopio aquí en la Tierra. Los investigadores creen que proviene de Proxima Centauri, y no saben muy bien qué la ha originado.

Las señales de radio provenientes del espacio exterior son relativamente comunes. Las más curiosas de todas son sin duda las que llegan de forma periódica como la que lo hace cada 16 días o la que tiene un ciclo de 157 días. a veces, si son lo suficientemente cercanas, se puede comprobar que las causa un magnetar por ejemplo. Otras veces hemos sido engañados durante años por un microondas.

En el caso de la nueva señal de radio detectada por el Breakthrough Listen y relatada por Scientific American las cosas no quedan nada claras.

Un evento único y sin modular

Si bien aún falta que se publique un informe completo del suceso, se han dado a conocer algunos detalles sobre esta nueva señal. Fue detectada por el Observatorio Parkes en Australia con un radiotelescopio de 64 metros (lejos de los 500 metros de FAST en China). Si las mediciones son correctas, proviene de la estrella vecina Proxima Centauri, que cuenta con dos exoplanetas conocidos de los cuales uno de ellos en zona habitable (aunque su habitabilidad es dudosa).

Que exista un planeta potencialmente habitable ahí no indica realmente mucho y las teorías relacionadas con vida extraterrestre pierden mucha fuerza si tenemos en cuenta las características de la señal y eventos pasados. La señal parece no estar modulada, es decir, no sigue un sistema concreto ni hay patrones. Por otra parte, sólo se ha dado una vez y no se ha repetido como ha ocurrido en otras ocasiones. Se entiende que si fuese una señal alienígena buscaría llamar la atención mediante repeticiones o sistemas obvios.

Por otro lado, hay que tener en cuenta que hay muchísimos eventos naturales que pueden provocar este tipo de señales. Una explosión, un magnetar o incluso interferencias con satélites de nuestra órbita que nos hagan creer que la señal viene de más lejos cuando en realidad es de aquí. Entre nosotros y Próxima Centauri hay muchísimos elementos, y cada uno de ellos puede provocar o interactuar con la señal.

Sea como sea, la detección de esta señal ha puesto en el foco de atención a Proxima Centauri. Los radiotelescopios probablemente ahora estén más atentos a la estrella vecina para ver si se repite el evento.