Tras 24 años de búqueda incansable, Guo Gangtang se acaba de reunir con su hijo. El Ministerio de Seguridad Pública chino ha confirmado que Guo Xinzhen está entre las personas localizadas en el marco de su campaña ‘Reunión’, lanzada a finales de 2020 con el objetivo de encontrar a niños desaparecidos en todo el país. El reencuentro de los Guo está siendo celebrado en toda China, porque el padre hace años que viene tocando el corazón de sus compatriotas. Su historia es, literalmente, digna de película.

LA ODISEA MOTORIZADA DE GANGTANG

Guo Xinzhen fue secuestrado por traficantes de personas cuando tenía dos años. Se lo llevaron cuando jugaba solo en la puerta de su casa en la provincia de Shandong, contigua a Henan. Sucedió el 21 de septiembre de 1997. El padre respondió a aquel golpe de la vida con una promesa: no descansar hasta traer a su hijo de vuelta a casa.

Guo Gangtang comenzó entonces una búsqueda infatigable que le ha llevado a recorrer más de 500 mil kilómetros por caminos y carreteras. Durante más de dos décadas, el hombre ha cruzado China con una motocicleta de la que siempre cuelgan dos carteles que muestran cada uno una foto de su hijo.

Según su propio recuento, han sido “veinte provincias y diez motocicletas”. También varias fracturas óseas en accidentes de tráfico. Pero el hombre nunca desesperó. “Sólo al salir a la carretera en busca de mi hijo, me sentí un padre”, dijo una vez a los medios chinos.

“Sólo al salir a la carretera en busca de mi hijo, me sentí un padre” – Guo Gangtang

El Ministerio de Seguridad Pública ha explicado que su fuerza policial logró rastrear la identidad de Xinzhen a través de pruebas de ADN. También se ha informado del arresto de dos personas sospechosas de secuestrar a Xinzhen en 1997.

Según el relato policial, el niño fue secuestrado por una mujer a la que solo han identificado con su apellido, Tang. Las autoridades explican que esa mujer y su novio vendieron inmediatamente al niño a una familia en cercana provincia de Henan.

Xinzhen aún vive en Henan. El joven, de 26 años, es profesor.

“Ahora que han encontrado a mi hijo, todo puede ser feliz a partir de ahora. A la pareja que crió a mi hijo los considero mis parientes” – Guo Gangtang

UN REENCUENTRO CELEBRADO EN TODO EL PAÍS

La perseverancia de Guo Gangtang hace tiempo que atrajo la atención de los medios en China. También la empatía y el respeto de una ciudadanía tristemente familiarizada con el problema del rapto de niños.

En 2015, la historia de su búsqueda incluso inspiró una película, Lost and Love, protagonizada por el actor Andy Lau, una de las estrellas más famosas de Hong Kong.

El martes, medios de todo el país se hicieron eco de la conmovedora reunión de la familia Guo. En las redes sociales, los hashtags relacionados con el tema se han leído cientos de millones de veces, y muchas personas envían sus mejores deseos a la familia.

En la red social Weibo abundan los mensajes de felicitación al padre, pero también las peticiones de un duro castigo para los secuestradores. También abundan los mensajes que piden una secuela de Lost and Love que refleje el final feliz de la epopeya de Guo Gangtan.

UNA PROBLEMÁTICA ENQUISTADA

El secuestro de niños es un problema social persistente en China desde hace décadas. Las desapariciones se cuentan por miles cada año. Por suerte, tecnologías como el análisis de ADN o el reconocimiento facial han ayudado en los últimos tiempos a resolver numerosos casos que llevaban años atascados.

La campaña Reunión, puesta en marcha a finales de 2020, se apoya en una base de ADN para reunir a menores desaparecidos con sus familias. El reencuentro de los Guo no es un caso aislado. Según el Ministerio de Seguridad Pública, en el marco de Reunión se ha encontrado a 2.609 personas desaparecidas cuando eran menores.

El hallazgo de estos menores —muchos ya adultos— ha dado pie al arresto de 372 sospechosos de secuestro y trata.