Un grupo de personas comenzó a promover la iniciativa del gobierno de imprimir un proyecto de ley de 10.000 pesos en las redes sociales con la imagen de Diego Maradona.

Una petición apareció en la plataforma de change.org – como varias generadas diariamente – diciendo: “Firme para que el gobierno emita el billete de 10.000 pesos de Maradona diciendo que los pesos son buscados en todo el mundo”.

“Hagamos el billete de Maradona 10.000, edición mundial limitada. El objetivo del siglo”, dijeron los autores de este homenaje al futbolista que murió la semana pasada. A las 15:00, la solicitud había sido firmada por 10.965 personas, como se ve en la plataforma social.

La semana pasada, la idea del Banco Central de Miguel Pesce de emitir un nuevo billete de 10 pesos con la foto del ex capitán de la selección nacional de fútbol ya se difundió en Twitter.

“Vengo a proponer un sueño”, publicó el usuario de Twitter @SoyElProfe7, junto con la imagen del billete diseñado para la ocasión. El puesto ya ha superado los 18.000 “likes” en la red social.

En cualquier caso, la iniciativa va en contra de la estrategia del gobierno de añadir billetes de mayor valor a los de 1000 pesos. En este contexto hay que recordar que este año se puso en práctica por primera vez la idea de imprimir billetes de 5.000 pesos, pero más tarde se descartó.

La impresión de billetes de valor superior al actual significa que el gobierno reconoce la pérdida de valor de los billetes actualmente en circulación debido a la inflación. Durante el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, el entonces presidente siempre estuvo en contra de un billete de más de 100 pesos, el valor más alto de la época, ya que así habría admitido los efectos de la inflación, cuyas estadísticas eran controvertidas.

Los defensores de la idea de un billete de 10.000 pesos son conscientes de que facilitaría el funcionamiento cotidiano de la sociedad, en un país que está muy acostumbrado a las transacciones en efectivo y en el que gran parte de su economía se basa en el sector no estructurado.

Cabe recordar que a finales de año, debido al aumento estacional de la demanda de papel moneda para pagar las vacaciones de Navidad, el Banco Central decidió importar urgentemente 170 millones de pesos de billetes de 1.000 pesos de España, ya que la producción local del próximo mes no será suficiente para satisfacer las necesidades del sistema financiero. Este es el segundo contrato de importación acordado este año, después de que la Casa de la Moneda de Brasil fuera contratada para producir 400 millones de unidades de la misma denominación.

“El banco central contrató a la casa de la moneda para producir billetes para satisfacer las necesidades especiales de efectivo resultantes de la crisis sanitaria en covid-19″, según confirmaron fuentes del banco central a este diario. Sin embargo, no hubo comentarios de la autoridad monetaria sobre la idea de honrar a Maradona con un nuevo billete.

Las existencias de billetes alcanzaron un nivel crítico este año. Esto se debe a una combinación de factores, entre ellos la disminución del poder adquisitivo de las emisiones existentes debido al contexto inflacionario (36% el año pasado), la mencionada decisión del Gobierno de no imprimir billetes de 5.000 pesos, lo que permite aumentar los precios, y la tendencia de las familias y las empresas a exigir más dinero en los días de aislamiento social preventivo y obligatorio.

Además, la inyección de cantidades considerables de dinero a personas que anteriormente no dependían de los bancos y que recibían beneficios adicionales como el Ingreso Familiar de Emergencia (RDI) significaba que no había suficiente papel moneda en circulación.