La policía disparó este martes 9 de febrero balas de goma y gases lacrimógenos contra los manifestantes que protestaban contra el golpe de estado militar en varias ciudades de Birmania, informaron testigos y medios de prensa locales e internacionales.

En Naipyidó, la capital, las fuerzas del orden dispararon «hicieron dos tiros de advertencia al aire y luego dispararon balas de goma» contra los manifestantes», dijo a la la agencia francesa de noticias AFP un habitante de la ciudad, mencionando heridos. Un periodista presente en el lugar confirmó los disparos efectuados por la policía.

También en Mandalay, segunda ciudad del país, la policía usó gases lacrimógenos para dispersar a la multitud que protestaba contra el golpe perpetrado el 1 de febrero, informaron testigos.

Las fuerzas del orden «dispararon gases solo contra los manifestantes que ondeaban banderas» de la Liga Nacional por la Democracia (LND), el partido de Aung San Suu Kyi, depuesta tras el golpe, dijo una habitante de la localidad, explicando que los vecinos habían socorrido a los manifestantes con agua después de que recibieran gases.

La policía había disparado anteriormente con cañones de agua a los manifestantes, que respondieron lanzando proyectiles,reportó por su parte la agencia británica Reuters, citando testigos. Videos en redes sociales muestran a gente corriendo, y se escucha el sonido de varios disparos en la distancia.

Desde la ciudad de Bago, al noreste del comercial centro de Yangon, videos muestran a la policía enfrentando a una gran multitud con cañones de agua.

Miles de manifestantes salieron de nuevo a las calles de Birmania este martes, desafiando a los militares, que el lunes prohibieron las reuniones de más de cinco personas.