El presidente de la República, Nicolás Maduro, sostuvo este jueves 11 de febrero un encuentro con la relatora especial de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Alena Douhan, quien investiga el impacto negativo de las medidas coercitivas unilaterales impuestas por EE.UU. en los derechos humanos del pueblo venezolano.

La reunión tuvo lugar en el Palacio de Miraflores y con ella culminó la visita oficial de Douhan a Venezuela, quien arribó el pasado 30 de enero al país, para determinar cómo han afectado las sanciones a la población.

A través de su cuenta en Twitter, el mandatario nacional subrayó que le expresó a la alta funcionaria el compromiso y esfuerzo del Estado venezolano por continuar trabajando  en el cumplimiento de los Objetivos del Desarrollo Sostenible, pese a las sanciones criminales.

Durante su estadía, Douhan se reunió con funcionarios del Gobierno Nacional, de la Asamblea Nacional, del Poder Judicial y del Consejo Nacional de Derechos Humanos, así como con representantes de organizaciones internacionales, cuerpo diplomático, sectores de la oposición y la sociedad civil.

Se espera que la relatora especial incluya sus observaciones en un informe que será presentado ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en el mes de septiembre.

Alena Dohuan, relatora especial de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), presentó un informe preliminar tras su visita en Venezuela para evaluar los efectos de las sanciones internacionales en la población y determinó que éstas, sumadas a la caída de los precios del petróleo, «han exacerbado las calamidades».

“Me preocupa que las sanciones unilaterales impuestas por Estados Unidos y la Unión Europea han exacerbado las calamidades económicas existentes”, expuso la alta funcionaria durante una rueda de prensa, en horas de la tarde de este viernes.

Tras una visita de 12 días, el pronunciamiento fue transmitido en vivo por los medios de comunicación del Estado, entre ellos Venezolana de Televisión (VTV) y Coquivacoa TV.

Sobre el dinero retenido en el exterior, destacó que los recursos pertenecen al Estado y no a un gobierno o persona en particular, por lo que motivó a no afectar a la ciudadanía. Por ello, enfatizó que «exhorto a las naciones a levantar las sanciones».

Señaló que la congelación de los activos del Banco Central de Venezuela (BCV) por el no reconocimiento de Nicolás Maduro, vulnera los derechos ciudadanos.

«Las sanciones han tenido un impacto gigantesco estorbando el derecho a la vida», reiteró al ser consultada por los periodistas, aseverando que las mismas tienen una afectación directo «en el derecho a la educación, la comida y las medicinas».

La relatora reconoció que el país tiene cuatro años años en hiperinflación y que la devaluación de la moneda llevó el salario mínimo entre 1 y 10 dólares.

Douhan repasó el historial de reuniones que sostuvo durante su estadía en el país, que incluyó encuentros con Maduro, y otra cincuentena de personas. 

Medicinas y comida

Catalogó como preocupante que las medicinas dependen de la importación.

Expuso que en Venezuela “la gente depende del CLAP y de la transferencia de dinero por el Carnet de la Patria”, aunque apuntó que el CLAP ha disminuido su cantidad de artículos.

Afirmó que el «aumento de la mortalidad, el aumento de los embarazos en niñas y adolescentes; que también ha contribuido en el aumento de enfermedades transmitibles sin la posibilidad de tratamiento acorde».

Informó que esta conclusión preliminar es solo una primera parte, ya que el final será expuesto en septiembre próximo ante el Consejo de los Derechos Humanos de la ONU.