En reciente operación del Ejército colombiano, en El Carmen, fueron recuperados cinco menores de edad, mientras que un adulto fue sometido a la justicia, tras ser sorprendidos con un fusil R15 Bush Máster, una pistola Prieto Beretta, proveedores y munición de diferentes calibres, que dejaron entrever el desolador panorama que siguen afrontando los niños y adolescentes que son reclutados por los grupos armados ilegales en la región.

La nota del diario La Opinión detalla que, según el Ejército, estos menores, al parecer, habían sido reclutados de manera forzada por la disidencia del frente 33º de las Farc que delinque de manera exponencial en Norte de Santander.

Los menores recuperados fueron remitidos al Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), en donde iniciarán el proceso de restablecimiento de sus derechos.

“Es importante anotar que con el decreto 965 del 2020, emanado por el Gobierno nacional, estos jóvenes no solo tendrán beneficios jurídicos, sino también beneficios socioeconómicos”, resalta el informe oficial de esa institución militar.

El general Marcos Pinto Lizarazo, comandante de la Segunda División del Ejército, rechazó esta práctica de los grupos ilegales y, a su vez, ratificó que sus hombres continuarán atacando estas organizaciones que se financian a través del narcotráfico, especialmente en la zona del Catatumbo.

“El Ejército ratifica el compromiso en la lucha frontal contra los grupos armados que no quieren la paz con legalidad en Norte de Santander”, dijo el oficial.

Por su parte, Diego Villamizar, defensor de derechos humanos, resaltó que esta práctica de los grupos alzados en armas ha sido constante a lo largo de la historia. Asimismo, dijo que según algunas denuncias que ha conocido, estas organizaciones criminales reclutan a los menores y los tienen en sus campamentos para evitar las acciones ofensivas de las autoridades.

“Hemos conocido que el modus operandi es tener niños y adolescentes en los campamentos, como escudos, para de esta manera dificultar las operaciones de las Fuerzas Militares”, señaló el defensor de derechos humanos.

Villamizar aseguró que “estos grupos ilegales, con presencia en Norte de Santander, reclutan a menores de edad en territorio venezolano para que delincan en suelo colombiano. Además, insistió en que en algunas escuelas del vecino país (Venezuela), las organizaciones ilegales, como la disidencia de las Farc y el ELN, entregan panfletos y marcan las paredes con las siglas de estos grupos para instar al reclutamiento”, añadió el diario colombiano.