Finlandia, Dinamarca y Suecia se integrarán a partir de este viernes al Mando Conjunto de la Otan en Norfolk, Estados Unidos, en un esfuerzo por reforzar la defensa y disuasión en la región del Atlántico Norte, el Ártico y el Báltico.

Esta reorganización forma parte de una reestructuración estratégica de la Alianza para fortalecer su capacidad operativa frente a las crecientes tensiones geopolíticas, especialmente con Rusia.

Hasta ahora, estos tres países nórdicos estaban adscritos al Mando Aliado de Brunssum, en los Países Bajos. Sin embargo, con la integración al Mando de Norfolk, se busca consolidar un bloque estratégico regional que incluya a Noruega, Islandia, Groenlandia y el Reino Unido, todos bajo un mismo liderazgo militar, algo que según los expertos, responde a la importancia estratégica del Ártico en el contexto actual de seguridad.

VILNIUS, LITHUANIA – JULY 10: Turkish President Recep Tayyip Erdogan (L) shakes hands with Swedish Prime Minister Ulf Kristersson (R) as the Secretary General of NATO Jens Stoltenberg (C) looks on during their meeting ahead of the NATO Summit on July 11, 2023 in Vilnius, Lithuania. The summit is bringing together NATO members and partner countries heads of state from July 11-12 to chart the alliance’s future, with Sweden’s application for membership and Russia’s ongoing war in Ukraine as major topics on the summit agenda. (Photo by Filip Singer – Pool/Getty Images)

Antti Häkkänen, ministro de Defensa finlandés, calificó el cambio como «un hito importante» en la consolidación de la Otan como fuerza disuasoria frente a las amenazas en un entorno geopolítico desafiante.

Durante la ceremonia celebrada en Helsinki, que marcó el inicio de la nueva estructura de mando, el presidente de Finlandia, Alexander Stubb, destacó que la unión de los países nórdicos bajo el mismo liderazgo es un paso lógico, no solo por la colaboración en defensa, sino también por ser todos aliados dentro de la Alianza Atlántica.

El comandante del Mando Conjunto de Norfolk, Douglas G. Perry, resaltó la creciente relevancia estratégica del Ártico y subrayó que con la incorporación de Finlandia y Suecia a la Otan, todos los países de la región pertenecen a la Alianza, excepto Rusia. Esto refuerza la capacidad de la Otan para coordinar y ejecutar operaciones en áreas clave como el Ártico, algo esencial para la defensa de los territorios nórdicos.

Finlandia y Suecia, que en 2023 y 2024 se unieron oficialmente a la Otan, pusieron fin a décadas de neutralidad militar a raíz de la invasión rusa de Ucrania. Su inclusión ha duplicado la frontera de la Alianza con Rusia, ampliando la presencia de la Otan en la región del norte de Europa. La Otan, que opera con tres mandos conjuntos en Norfolk, Brunssum y Nápoles, se encargará de planificar y ejecutar maniobras conjuntas entre los países miembros y de coordinar la defensa de la región ante cualquier amenaza.

Con este movimiento, la Alianza refuerza su estructura de defensa, asegurando que los países nórdicos estén mejor preparados frente a los retos militares y geopolíticos que plantea la situación actual.