Aunque para muchas instancias lo que hay es una emergencia humanitaria completa, la ONG Transparencia Venezuela habla de emergencia humanitaria.

Transparencia Venezuela ha indicado que en “el contexto venezolano actual se ha empleado el término crisis humanitaria como acepción. Dado el recrudecido panorama político, de escasez de alimentos y medicinas, incremento de índice delictivo y debilidad institucional (por mencionar algunos elementos)”.

Tomando en cuenta la situación de emergencia humanitaria y de escasez. y ahora sobre todo alto costo de las medicinas, es que muchas personas. para curarse y hasta salvarse, buscan diversas opciones, nada fáciles.

Ante la pandemia desatada que afecta a Venezuela y por ende al estado Táchira, muchas personas buscan la opción de vacunarse en Colombia.

El Táchira, en su condición de estado fronterizo, tiene al lado al Norte de Santander, donde también hay pandemia, pero, por lo visto y leído, hay más posibilidades de vacunación.

Precisamente, como en esta región fronteriza hay miles de familias con lazos consanguíneos en Colombia, y tienen doble nacionalidad: colombiana y venezolana, allí, al cruzar la frontera, les están poniendo las vacunas contra la covid-19… las vacunas para tratar de salvar sus vidas.

Y con la frontera venezolana cerrada, se ha permitido que personas por razones de salud crucen por el puente binacional Simón Bolívar –con la debida tarjeta de cita- y se vacunen en el Norte de Santander.

Se ha visto, también, que ha aumentado la cantidad de personas que cruzan a vacunarse, con la primera o segunda dosis, teniendo en cuenta que en Venezuela no hay un plan masivo de vacunación.

Lo que no se entiende es por qué en la semana que pasó, para hacer la situación más difícil, impidieron el paso a las personas que iban a ponerse la segunda dosis. Lo que obligó a muchas personas a esperar horas o a irse por las peligrosas trochas.

“El acceso por el canal humanitario se permite solo para cuatro casos: personas que van por casos oncológicos, renales, VIH y niños que necesitan ser vacunados en el vecino país. Este miércoles, la situación se agravó para los ciudadanos que deseaban ir a vacunarse a Colombia contra la covid-19. “Ni para la primera ni segunda dosis estamos permitiendo el paso», dijo un efectivo de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), a la altura de la valla metálica”.

Uno piensa que si personas, la mayoría de la tercera edad, van a buscar la prevención a la salud y se les impide el paso por el puente binacional, acaso no se les están violentando dos derechos humanos: el de la salud y de la libre movilidad.

Ante la emergencia humanitaria que vive Venezuela, pero que el Gobierno nacional desmiente de palabra, solo de palabra, no sería verdaderamente humano que personas con nacionalidad venezolana y colombiana crucen el puente, se vacunen y vuelvan por ese mismo canal.

Por qué hacer la situación más difícil. Por qué más torturas para quienes buscan la vacuna que Venezuela, por ahora, no les pone.

Se vio que la situación se flexibilizó. Luego de esperar, dejaron pasar. Pero las personas esperan a pleno sol en San Antonio del Táchira, donde todos sabemos que la temperatura es alta, hasta que las autoridades, en este caso militares, las dejan pasar.

Otros se van por trochas, donde hay incomodidad y peligro, pero antes que perder la vacuna en Colombia, prefieren arriesgarse o hasta pagar.

Vemos cómo se violentan los más elementales derechos de los venezolanos.