La Oficina de la ONU para los Derechos Humanos pidió el viernes a las autoridades del emirato de Dubai pruebas de que la princesa Latifa Al Maktoum, una de las hijas del emir, sigue viva, después de que denunciara que está retenida como “rehén” en una villa y teme por su vida tras intentar huir del país en 2018.

”Estamos preocupados al ver la perturbadora evidencia en video que ha llegado esta semana y pedimos más información y clarificación sobre su situación actual”, dijo en una rueda de prensa la vocera de la oficina, Liz Throssell.

“Dadas nuestras serias preocupaciones sobre la princesa, hemos pedido que la respuesta del Gobierno sea un asunto prioritario y esperamos recibirla y considerarla pronto”, dijo Throssell sobre el pedido de prueba de vida.

Los videos de la hija de Mohammed bin Rashid al Maktoum, emir de Dubai, así como vicepresidente y primer ministro de Emiratos Árabes, fueron grabados en 2019 y difundidos este martes por la cadena BBC.

La princesa, de 35 años, que permanece en arresto domiciliario desde hace casi tres años, grabó esos videos durante varios meses en secreto pero las comunicaciones se han detenido, según la BBC.

“Estoy grabando este video desde un baño, porque es la única habitación con una puerta que puedo bloquear. (…) Soy una rehén y esta villa se ha convertido en una cárcel. Todas las ventanas están cerradas con rejas, no puedo abrir ninguna”, relata Al Maktoum, de 35 años, en uno de los vídeos.

“Todos los días estoy preocupada por mi seguridad y por mi vida. No sé si voy a sobrevivir a esta situación”, sostiene la princesa, que asegura que cinco policías vigilan la mansión desde el exterior, mientras que otros dos se mantienen en el interior.

Latifa trató de huir de Dubái por primera vez cuando tenía 16 años, pero comenzó a planear su intento más serio en 2011, tras mantener contacto con el empresario francés Herve Jaubert, según relata el canal público británico.

El 24 de febrero de 2018, la princesa se subió a una lancha hinchable junto a Tiina Jauhiainen, que había sido su instructora de artes marciales, y navegaron hasta aguas internacionales, donde les esperaba un yate con bandera estadounidense.

Ocho días después, frente a las costas de la India, el barco fue asaltado por “comandos” que utilizaron granadas de humo, encañonaron a ambas mujeres y devolvieron a Dubai a Latifa, de la que no se había vuelto a saber nada hasta ahora, según el relato publicado por la BBC.

La embajada de Emiratos Árabes Unidos en Londres afirmó que la princesa Latifa está “siendo atendida en su hogar” y que “su estado mejora”, en un comunicado publicado este viernes.

“Su familia confirmó que Su Alteza está siendo atendida en su hogar, apoyada por su familia y por profesionales sanitarios. Su estado continúa mejorando y esperamos que retome su vida pública a su debido tiempo”, indicó la embajada.

En 2019, las tensiones entre la familia del emir llegaron hasta los tribunales británicos, cuando la princesa Haya Bint Al Husein de Jordania, sexta esposa del millonario mandatario, viajó al Reino Unido y pidió protección para ella y dos de sus hijos.

En ese proceso, el Tribunal Superior de Inglaterra consideró probado, entre otros hechos, que el jeque “ordenó y orquestó el retorno obligado de su hija Latifa a la casa familiar en Dubái” en dos ocasiones, junio de 2002 y febrero de 2018.

“En 2002 el retorno se produjo desde la frontera de Dubái con Omán, mientras que en 2018 se hizo con un comando armado en el mar cerca de la costa de la India”, describe la sentencia. El juez también resalta que en agosto de 2000 el emir organizó el “secuestro” de su hija Shamsa para llevarla desde el Reino Unido a Dubái.

Según los medios británicos, el mandatario, de 71 años, ha estado casado con seis mujeres y ha tenido al menos 30 vástagos.