La policía alemana ha informado de que se ha detenido a un adolescente de 15 años por su posible implicación en el ataque ocurrido anoche en un festival al aire libre en Solingen, en el oeste del país, que dejó tres muertos y ocho heridoscinco ellos de gravedad. «Esta mañana ha sido detenido un individuo de 15 años», ha anunciado en una rueda de prensa un portavoz de la policía, Thorsten Fleiss.

Según ha explicado, el adolescente es sospechoso de haber tenido conocimiento previo del suceso y de no haber actuado para impedirlo, pero los investigadores creen que no se trata del atacante, del que se piensa que actuó en solitario. Según los investigadores, el autor aún no ha sido identificado y sigue en busca y captura. Unidades especiales de la policía se han unido al operativo.

Tanto la fiscalía como la policía han calificado el ataque, ocurrido en el centro de la ciudad, como posible «atentado» y se ha desplegado un gran operativo con numerosos agentes armados, vehículos especiales y el apoyo de helicópteros para buscar al responsable.

«Hasta ahora no hemos podido identificar un motivo, pero considerando las circunstancias generales, no podemos descartar» la posibilidad de terrorismo, ha afirmado Markus Caspers, de la sección antiterrorista de la fiscalía, aunque no ha ofrecido más detalles.

La Fiscalía no descarta motivación islamista

La Fiscalía Federal alemana, la única competente para casos de terrorismo, se ha personado en Solingen en previsión de que el ataque tenga motivación islamista. Se prepara para tomar así las riendas de un ataque que ha conmocionado al país por su brutalidad.

La policía está muy reticente de informar de sus avances para evitar interferencias en la investigación. Entre las últimas novedades, sin embargo, hay dos de relevancia. Se ha encontrado la que probablemente ha sido el arma usada en el ataque, un cuchillo con una hoja de 20 centímetros.

Apareció en un contenedor de basura situado a unos 200 metros del lugar donde se produjeron los acuchillamientos, que, según un vídeo en poder de la policía, fueron deliberados y a matar. En la grabación, según ha trascendido, se observa al individuo buscando el cuello, apuntando a la yugular.

«Las víctimas eran desconocidos, sin ninguna relación. Por eso pensamos desde el principio que en la posible que se tratara de un acto terrorista», afirmó el director del operativo policial, Thorsten Fleiss. «En las imágenes del ataque, las cuchilladas iban dirigidas de forma muy precisa a los cuellos de las víctimas, sin ningún motivo aparente, salvo el de matar», precisó.

Comisarios de policía retirados interrogados por distintas televisiones locales esperan que en el cuchillo encontrado haya rastros suficientes para hacer pruebas de ADN y el «olor» suficiente del agresor para que los perros puedan determinar al menos hacia dónde y cómo huyó.

Los investigadores trabajan contrarreloj, aunque con el apoyo del conjunto de la clase política y de la ministra de Interior, la socialdemócrata Nancy Faser, que este sábado se trasladó a Solingen para informarse personalmente de la situación.