¿Demasiada polémica para la academia? La RAE decidió dar un paso atrás en su primer guiño al lenguaje inclusivo.

Frente a la polémica y la confusión, la Real Academia Española (RAE) prefirió retirar de su observatorio el pronombre «elle», utilizado en el lenguaje inclusivo para referirse a personas de género no binario.

Mientras estuvo incluido en el observatorio, la RAE definió así «elle»: «pronombre de uso no generalizado creado para aludir a quienes puedan no sentirse identificados con ninguno los dos géneros tradicionalmente existentes».

Esta era la primera vez que la institución incluía el lenguaje inclusivo en el observatorio, lo cual no significaba que ya aceptará su uso, pero podía dar paso a que, en algún momento, la palabra fuera objeto de estudio para valorar su incorporación al diccionario.

El pronombre «elle» fue incluido el 27 de octubre pasado, y lo retiraron apenas tres días después.

La respuesta ante la baja fue: «Debido a la confusión que ha generado la presencia de ‘elle’ en el ‘Observatorio de palabras’, se ha considerado preferible sacar esta entrada. Cuando se difunda ampliamente el funcionamiento y cometido de esta sección, se volverá a valorar».

Cancelar el estudio que se había propuesto sobre el pronombre «elle» significó un retroceso lingüístico. Esto se debe a que aún no se va a reconocer la utilización de este pronombre que evita la dualidad de géneros que se presenta en el lenguaje. Así, el brevísimo momento progresista de la RAE se esfumó.

Pronombres inclusivos.

El pronombre «elle» se usa como término inclusivo para referirse a las personas no binarias. También se utiliza para referirse a colectivos de personas formados por mujeres, varones y otras disidencias. Con el pronombre «elle» se pretende representar equitativamente a todas las personas.

Esta es la segunda vez en el año que la RAE pone trabas para usar el lenguaje inclusivo. La vez anterior fue cuando determinaron que no había razones para cambiar su criterio lingüístico de la Constitución de España.

El observatorio de la RAE no sólo hizo este acercamiento al lenguaje inclusivo con el pronombre «elle». También incluyó en su lista de la palabras a revisar «transfobia» y «transfóbica/o». Sin embargo, estas también fueron removidas del la lista que publica el Observatorio.

El primer término fue definido de la siguiente manera: «Palabra usada en referencia al odio o aversión a las personas transgénero o transexuales, es un neologismo reciente correctamente formado, con la misma pauta que homofobia (de homo[sexual] + fobia)».

En el segundo caso: «La voz transfóbico es un derivado válido de transfobia. También es correcto el uso de tránsfobo«.

Quitar estas palabras es también un retroceso para el universo lingüístico de la diversidad sexual. A partir de ahora habrá que esperar a que la RAE nuevamente decida estudiarlas. Si se consiguen argumentos académicos válidos y sólidos podrán ser incluidas en nuevos diccionarios.