Los tres ciudadanos nigerianos que llegaron como polizones este lunes a la isla española de Gran Canaria (Atlántico) han solicitado asilo a las autoridades españolas, por lo que se ha dado permiso al petrolero «Alithini II» para que abandone el puerto y siga su ruta sin ellos, informaron a EFE fuentes de la Delegación del Gobierno.

Hasta este miércoles dos de los polizones seguían a bordo del buque, cuyo capitán era hasta ahora responsable de su custodia, y el tercero permanecía hospitalizado recuperándose de un cuadro de deshidratación.

Este último pidió hoy protección internacional en el Hospital, tras recibir la visita de un miembro del secretariado de migraciones de la Diócesis de Canarias, que le ofreció la ayuda de la Iglesia y del colectivo Caminando Fronteras, según dijo a EFE una fuente directamente implicada en la visita.

Los otros dos migrantes pidieron asilo a bordo del barco, tras una visita de agentes de la Policía para interesarse por su situación, según precisaron a EFE fuentes de las organizaciones que les están prestando asistencia.