Los manifestantes piden que la reforma sea retirada, no modificada, por lo que persisten algunos enfrentamientos entre ellos y policías en Bogotá

Colombia cumplía su tercer día consecutivo de protestas en el marco del paro nacional convocado por las centrales obreras del país en rechazo a una polémica reforma tributaria impulsada por el Gobierno, y al cual anunciaron su adhesión las comunidades indígenas del departamento del Cauca.

“En audiencia pública (…) en cabeza del consejero mayor, Hermes Pete, las 127 autoridades del CRIC (Comité Regional Indígena del Cauca), han mandatado apoyar la Minga Nacional a partir de la tarde de hoy“, anunció la Organización Nacional Indígena de Colombia.

Asimismo, el Comité se declaró en asamblea permanente nacional “ante el no retiro de la reforma tributaria y la arrogancia del Gobierno Nacional”.

Las manifestaciones se mantenían el viernes en varias ciudades del país, aunque con bastante menor intensidad que las registradas el miércoles, luego de que el presidente Iván Duque sostuvo que se modificarán varios puntos de la reforma tributaria, pero que no la retirará del Congreso, ya que, aseguró, eso generaría una incertidumbre financiera.

Dentro del trámite legislativo, Duque pidió construir un nuevo texto con el Congreso que recoja el consenso y que permita “nutrirse de propuestas valiosas”.

Sin embargo, los manifestantes piden que la reforma sea retirada, no modificada, por lo que persisten algunos enfrentamientos entre ellos y policías en Bogotá, donde también hay cierre de algunas vías.

Cali es la ciudad más afectada desde el miércoles por las movilizaciones y los disturbios, que se han materializado en el bloqueo de las principales vías de la ciudad y la incineración de varias estaciones de autobuses del sistema de transporte masivo, pese a los refuerzos de la Fuerza Pública anunciados por Diego Molano, ministro de Defensa.

Molano, quien permanece en Cali junto con la cúpula militar, informó que desde la noche del jueves se instaló un Consejo Extraordinario de Seguridad en la ciudad que se mantendrá hasta que se restablezca la normalidad.

Hemos identificado que los hechos violentos han sido premeditados, planeados y patrocinados por organizaciones criminales. Estamos en individualizaciones para judicializar a los responsables, tenemos abiertos 23 procesos investigativos en curso”, señaló.

El ministro afirmó que en la ciudad “se reforzó el pie de fuerza en las calles con más de 2.500 miembros de la Fuerza Pública (…), dos helicópteros y 60 motos adicionales”.

Asimismo, dijo que se han registrado más de 60 personas que participaron en actos vandálicos, por quienes ofreció recompensas.

El paro se lleva a cabo pese al tercer pico de la pandemia en el país, que el viernes reportó una cifra de 490 decesos, con lo cual suman ya 73.720 las victimas mortales desde marzo de 2020.