La crisis humanitaria en Corea del Norte atraviesa su peor momento, marcada por una aguda escasez de alimentos, agua potable y servicios médicos y agravada por un mal gobierno y medidas políticas internas represivas, advirtió en informe una organización no gubernamental internacional.

En concreto, el “Inform Severity Index” ( Índice de Gravedad), elaborado por el Proyecto de Evaluación de Capacidades, con sede en Ginebra (ACAPS), asevera que el “reino ermitaño” se ubica en la categoría “muy alta” en lo referido al nivel de gravedad de su crisis humanitaria.

La categoría es la más alta de los seis niveles de los que consta el informe. El informe analizó la situación de aproximadamente 60 países. Corea del Norte se encuentra entre los 13 con el nivel más alarmante. El documento indica a su vez que está entre las naciones con las “restricciones más altas” a la hora de facilitar acceso a la ayuda humanitaria.

¨La situación humanitaria en la República Popular Democrática de Corea (RPDC) está impulsada por factores políticos y económicos, así como por peligros naturales”, señala el informe, utilizando el nombre oficial de Corea del Norte.

El informe estima que alrededor de 8,7 millones de personas carecen de acceso a instalaciones de salud adecuadas, mientras que 8,4 millones de personas no tienen acceso a fuentes de agua potable. La inseguridad alimentaria crónica y el acceso limitado a servicios básicos como la atención médica y el agua han dejado a más de 10 millones de personas necesitadas de asistencia humanitaria.

Ministro de Unificación coreana rechaza rumores sobre la salud de Kim Jong- un | Política | DW | 28.04.2020

El informe también remarca como “la mala gobernabilidad y las medidas políticas internas represivas han impactado negativamente en la población al restringir el movimiento y el acceso a bienes y servicios”.

Corea del Norte atravesó uno de los años con peores desastres naturales desde 1981, considerando que fue golpeada por fuertes tormentas e inundaciones. Según el informe, aún no está claro en qué medida afectarán la seguridad alimentaria en todo el país, pero se sabe que, por ejemplo, la escasez ha obligado a los maestros a cosechar sus raciones de papas.

El alarmante escenario tienelugar tras las lluvias torrenciales que eliminaron tierras de cultivo y dieron otro golpe a una economía que ya se encontraba fuertemente golpeada por el impacto del COVID-19. Se espera que la combinación de estos factores genere la mayor contracción en la economía norcoreana en más de dos décadas.

La producción agrícola es esencial para la economía de Corea del Norte, considerando las sanciones y restricciones al mercado internacional impuestas al régimen como consecuencia de sus continuas pruebas de misiles nucleares y balísticos. Corea del Norte sufre una escasez crónica de alimentos debido a las condiciones climáticas desfavorables de los últimos años y al impacto de las sanciones globales en su economía.

Se teme que un cierre prolongado de la frontera establecido desde principios de este año debido a la pandemia mundial de coronavirus empeore las cosas al obstaculizar las importaciones de granos y otros materiales necesarios de China.