Los cuerpos de dos de los seis trabajadores latinos desaparecidos al hundirse el puente Francis Scott Key el martes de madrugada en Baltimore (Maryland) fueron recuperados este miércoles dentro de una camioneta sumergida en el río Patapsco, según se informó en una rueda de prensa del gobernador, el demócrata Wes Moore, que le dijo a las familias, en español: «Estamos contigo».

Los buzos encontraron a las 10 de la mañana una camioneta roja sumergida a 25 pies de profundidad en la parte central del puente con dos personas dentro, que fueron identificadas como Alejandro Fernandez Fuentes, mexicano de 35 años, y Dorlian Castillo Cabrera, guatemalteco de 26 años.

La Guardia Costera había reanudado a las seis de la mañana la búsqueda de los seis trabajadores de la empresa Brawner Builders que cayeron al río Patapsco al derrumbar el barco el puente Francis Scott Key el martes por la madrugada, a los que habían dado ya por muertos la noche anterior, cancelando así el operativo de rescate.

Un equipo de ocho trabajadores de la construcción se encontraba reparando ese tramo elevado de la carretera interestatal 695 en el momento del choque del carguero y no pudieron ser alertados a tiempo. Uno de ellos logró sobrevivir sin heridas mientras que otro fue hospitalizado y dado de alta este miércoles. Otros seis desaparecieron en el derrumbe.

Las identidades de los seis trabajadores desaparecidos aún no se han difundido de manera oficial, pero las embajadas de México, Guatemala, El Salvador y Honduras han informado que algunos son de esos países.

El hondureño Maynor Suazo y el salvadoreño Miguel Luna fueron identificados por sus familias en entrevista con Noticias Telemundo como dos de los trabajadores que se encontraban de turno en el puente cuando ocurrió el accidente.

La presidenta de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB, en inglés), Jennifer Homendy, dijo a la cadena de noticias NBC News que se ha recuperado la caja negra del carguero, un dispositivo que podría revelar datos a los investigadores, incluyendo el posicionamiento y la velocidad del barco, lo que podría haber sucedido con su energía, así como las conversaciones de las últimas 12 horas.

Un equipo de investigación de la NTSB tiene previsto subir a bordo del carguero el miércoles y hablar con miembros de la tripulación. La oficial explicó que su equipo examinará una serie de cuestiones, entre ellas qué protecciones tenían las estructuras de soporte del puente y si deberían haber sido más robustas, y la posibilidad de que el combustible contaminado pudiera haber influido en la tragedia, informó el martes el diario The Wall Street Journal.

Homendy señaló que analizarán cómo se destruyó el puente por la pérdida de un único pilar de apoyo y cómo podrían evitarse catástrofes similares en otros lugares del país. “Vamos a estudiar ese tipo de infraestructuras para evitar que se produzcan este tipo de derrumbes”, declaró. No obstante, Homendy se mostró cautelosa al dejar claro que la investigación podría durar dos años. 

Tragedia en mitad de la noche

A primera hora de la madrugada del martes la radio policial recibió una alerta: un enorme carguero había perdido su capacidad de dirección y se dirigía hacia el puente Francis Scott Key en la bahía de Baltimore. En unos 90 segundos, los agentes respondieron que habían conseguido detener el tráfico de vehículos sobre el puente en ambas direcciones. Uno de ellos dijo que estaba a punto de entrar en el puente para alertar a un equipo de construcción, pero ya era demasiado tarde: sin dirección y cargado de enormes contenedores, el buque se estrelló contra un pilar de apoyo.