Los medicamentos como Ozempic™ o Wegovy™ (cuyo principio activo es la semaglutida) pertenecen a la clase de los agonistas del péptido 1 similar al glucagón (GLP-1). Fueron aprobados para el tratamiento de la diabetes. Después se descubrió que también son útiles para bajar el sobrepeso y la obesidad en cierto grupo de pacientes.

Se han vuelto populares a través de la difusión que han hecho influencers de redes sociales, estrellas de Hollywood y figuras públicas como el empresario Elon Musk. El impulso de ese interés masivo incluso llevó al agotamiento en las farmacias de Estados Unidos y otros países donde recibió aprobación.

Ahora un estudio en Canadá reveló que los medicamentos pueden conllevar un mayor riesgo de problemas gastrointestinales graves para los pacientes que los reciben. La investigación fue llevada a cabo en la Universidad de Columbia Británica sobre los medicamentos conocidos como agonistas del GLP-1, que incluyen también las marcas Rybelsus™ y Saxenda™.Encontraron que se asocian a un mayor riesgo de afecciones médicas graves, como parálisis estomacal, pancreatitis y obstrucción intestinal.

Si bien estudios anteriores han puesto de manifiesto algunos de estos riesgos en pacientes diabéticos, éste es el primer estudio de gran envergadura a nivel poblacional que examina los efectos gastrointestinales adversos en pacientes no diabéticos que utilizan estos fármacos específicamente para perder peso. Los resultados se publicaron en la revista JAMA.

“Al tener en cuenta el amplio uso de estos fármacos, estos eventos adversos, aunque poco frecuentes, deben ser considerados por los pacientes que piensan en usarlos para perder peso”, dijo el primer autor del trabajo Mohit Sodhi, que estudia los eventos adversos de los medicamentos comúnmente prescritos.

“El cálculo del riesgo varía en función de si el paciente utiliza estos fármacos para la diabetes, la obesidad o la pérdida de peso en general. Las personas por lo demás sanas pueden estar menos dispuestas a aceptar estos efectos adversos potencialmente graves”, señaló.

Graciela Fuente, consultora de la Unidad de Nutrición del Hospital Carlos Durand de Buenos Aires y ex presidenta de la Sociedad Argentina de Diabetes, dijo a Infobae que, “en base a la información brindada por el nuevo estudio observacional en Canadá, no se cambia la indicación de quienes pueden recibir este tipo de fármacos. Se enfatiza que en la muestra se detectó mayor incidencia de efectos colaterales gastrointestinales en comparación con otra droga para el tratamiento de la obesidad que tiene un mecanismo de acción diferente a los agonistas GLP-1 y no actúa sobre el aparato digestivo”.

Los eventos adversos en personas con obesidad asociados a los agonistas GLP-1 son conocidos, pero muchas veces no son tenidos en cuenta, especialmente si no hay una supervisión profesional en la indicación de estos fármacos. “Por eso, siempre el médico debe evaluar al paciente en su totalidad e informarle el riesgo potencial a la intervención prescripta”, precisó. Los medicamentos agonistas GLP-1 están indicados para personas con obesidad, o con índice de masa corporal mayor a 27 que tengan factores de riesgo cardiovascular y que no presenten las situaciones que contraindiquen este tipo de fármacos.

“Es real que la droga semaglutida tiene menos historia en su trayectoria en el campo clínico de la obesidad sin diabetes, pero liraglutida cuenta con la aprobación por FDA desde 2015 y ambas tienen la evidencia científica necesaria para que hayan podido avanzar hasta su uso actual”, explicó. Las personas deberían tener en cuenta que “siempre debe haber una evaluación clínica completa y un tratamiento integral de la obesidad”, que es una enfermedad de muy difícil manejo, afirmó.

La médica endocrinóloga y especialista en Diabetes Romyna La Rosa, Directora del Instituto Neurometabólico de Perú, advirtió a Infobae que, “en general, sabemos que en los grupos de agonistas de GLP1, los efectos secundarios más frecuentes son en vía digestiva, como dolores abdominales, náuseas y vómitos, que es lo más común que podría pasar”. Sin embargo, también señaló, “en cuanto al hallazgo en este estudio sobre la parálisis de estómago, pancreatitis y obstrucción intestinal, que son problemas más serios, si bien es cierto que es infrecuente, siempre preguntamos las condiciones previas que pudieran hacer al paciente de mayor riesgo para el desarrollo de estos efectos secundarios”.

La experta enfatizó la importancia de evaluar a los pacientes antes de prescribir estos medicamentos: “Por ejemplo, si el paciente tiene alguna patología que le condicione, como tránsito intestinal lento, no sería un candidato adecuado. Tampoco lo sería si tiene, por ejemplo, megacolon, que altera el tránsito intestinal”. La Rosa también advirtió sobre los riesgos para aquellos que han tenido cirugías previas, “Si el paciente tuviera alguna cirugía previa de vía intestinal que le pueda generar bridas o adherencias, obviamente, tendría un mayor riesgo de obstrucción intestinal si se le recetan agonistas GLP1″.

En ese marco, la experta de Perú subrayó la importancia de la selección adecuada del paciente: “Mientras se tenga en cuenta el tipo de paciente al cual se debe elegir, que no tenga ningún factor de riesgo que le pueda sumar o agregar para el desarrollo de estas complicaciones, en este caso infrecuentes, no habrá ningún problema”. Además, agregó que es esencial “siempre hacerle saber al paciente los efectos secundarios que podrían haber y los signos de alarma”.

El Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima) de Colombia alertó sobre el uso incorrecto de productos con semaglutida para bajar de peso. Estos productos, como OZEMPIC® y WEGOVY®, “han sido promocionados en plataformas digitales por celebridades e influencers”. En ese país, OZEMPIC® tiene registro sanitario para uso en adultos con diabetes tipo 2 y se vende bajo fórmula médica. WEGOVY® no tiene registro sanitario en Colombia.