La historia de Nigel, el loro gris africano, que ha cautivado a los amantes de las aves y lingüistas por igual, revela una asombrosa travesía de cuatro años en la que el ave no solo ha explorado nuevos territorios sino que también ha adquirido una nueva lengua.

Darren Chick, el propietario británico de Nigel, solía jactarse de la maestría con la que su loro replicaba el inglés con un distinguido acento británico. Sin embargo, la vida de Nigel dio un vuelco en 2015 cuando decidió emprender un vuelo sin retorno desde su hogar en Torrance, California. Durante su ausencia, el loro fue acogido por la familia Hernández-Smith, una familia de habla hispana, lo que llevó a que Nigel ampliara su repertorio lingüístico con frases como “buenos días” y expresiones en español, reseñó 0800 Noticias.

El sorprendente reencuentro fue posible gracias a Julissa Sperling, propietaria de un centro estético canino, quien descubrió a Nigel en un patio trasero. Impresionada por las habilidades comunicativas del loro, Sperling inició una búsqueda en línea para encontrar a los dueños, y al no tener éxito, recurrió a la tienda de mascotas Animal Lovers. La persistencia de Sperling y la colaboración de la veterinaria Teresa Micco, quien había perdido previamente a un loro llamado Benjamin, jugaron un papel clave en la reunión de Nigel con Chick.

Teresa Micco, conocida por su intensiva búsqueda de loros extraviados, utilizó un microchip para confirmar la identidad de Nigel y rastrear a su dueño original. Aunque inicialmente pensó que el loro podría ser su amado Benjamin, notó diferencias clave y finalmente logró llevar a Nigel de vuelta a casa.

El misterio sobre las experiencias de Nigel durante sus cuatro años de ausencia persiste. Aunque se desconoce el itinerario exacto del loro, se especula que pudo haber pasado por varias familias durante ese tiempo. Los loros grises africanos, conocidos por su longevidad de hasta 50 años y su capacidad para imitar la voz humana, son criaturas vulnerables fuera de su entorno doméstico, y la historia de Nigel subraya la importancia de su conexión con los seres humanos.

El regreso de Nigel no solo ha sorprendido a Chick, quien lo identificó rápidamente a pesar del cambio en el idioma, sino que también ha suscitado la pregunta de si el ave intentará recuperar su inglés original o si Chick aprenderá español bajo la tutela de su políglota mascota. La historia de Nigel es un testimonio de la capacidad de adaptación y aprendizaje de estas aves, así como de la sorprendente conexión que pueden desarrollar con los seres humanos.