Un juez de Texas ordenó este miércoles retirar las boyas flotantes colocadas en el río Grande de Estados Unidos, en la frontera sur del país que colinda con México, las cuales impedían el paso de migrantes irregulares, provenientes en su mayoría de países como Venezuela, Cuba y Haití.

Estas boyas deberán retirarse antes del 15 de septiembre, reseñó Telesur.

La decisión sobre el muro acuático, que forma parte de las medidas del gobernador de Texas, Greg Abott, en su Operación Estrella Solitaria, ignoró la demanda presentada por la administración del presidente Joe Biden, en la que argumentó que ese estado no tiene derecho para colocar estructuras en vías navegables federales.

Sin embargo, “el permiso es exactamente lo que exige la ley federal antes de instalar obstrucciones en las aguas navegables del país”, subrayó el magistrado.