Maria Elvira Salazar, congresista republicana por Florida, presentó este martes en una rueda de prensa una nueva propuesta de reforma migratoria conocida como Dignity Act (Plan Dignidad, en español), que permitiría a los trabajadores indocumentados conseguir la residencia permanente a cambio de pagar 10,000 dólares durante una década, además de parte de su salario.

«[La propuesta] aborda la situación en la frontera, la economía y la situación laboral [de los migrantes]», dijo Salazar, que agregó que ha recibido apoyo tanto de demócratas como de republicanos y que su plan está listo para ser presentado oficialmente ante el Congreso.

El proyecto de ley prevé que los inmigrantes indocumentados paguen 1,000 dólares al año, durante 10 años, para sumarse a un programa conocido Dignity Program, que permitirá que «salgan de las sombras y vivan en dignidad» como residentes legales.

Durante una rueda de prensa este martes en la Casa Blanca, la corresponsal de Noticias Telemundo Cristina Londoño preguntó a Jen Psaki, secretaria de Prensa, si el presidente, Joe Biden, invitaría a Salazar a discutir sobre la propuesta.

“El presidente propuso una legislación de inmigración desde el primer día en el cargo”, respondió Psaki, que dijo que no conocía “los detalles específicos” del proyecto de Salazar, pero que ciertamente siempre buscan “trabajar en conjunto” para “crear un sistema más seguro y efectivo en la frontera”.